domingo, abril 16, 2006

Dos años sin Aznar

Mañana se cumplen 2 años de la llegada al poder del Presidente Rodríguez y quisiera rendir un homenaje a su antecesor el Presidente Aznar. Confieso que no soy neutral, me considero aznarista, pero no por vocación sino por convicción. En un país que acababa de atravesar una etapa de gobierno donde el amiguismo, la corrupción política, social y judicial campaba por su respeto, donde se tapaban crímenes de estado, donde el Director de la Guardia Civil era un ladrón, donde pululaban los maletines o se expropiaba ilegalmente, caso Rumasa, donde ETA imponía sus condiciones y que todo se tapaba con el “gracejo” y la “simpatía” de Felipe González, mientras paro e inflación nos aplastaba, llegaba al poder un hombre nada simpático, mas bien serio y muy sobrio, como buen castellano: la antítesis de González.
Desde el principio se notó el cambio, radical cambio, se impuso la seriedad, el orden y se atajó la corrupción. Las diversas áreas políticas sufrieron una transformación sustancial: en economía Rato reorientó la misma hacia el equilibrio presupuestario y la productividad; en la internacional, pronto nos convertimos en un país de referencia, respetado y con el que se contaba, llegando, vía Tratado de Niza, a conseguir situarse entre los grandes de Europa, con el poco entusiasmo de Alemania y Francia. También la influencia se extendió a Latinoamérica y Estados Unidos, cuadró a dictadores como Castro o Mohammed VI, se mantuvo firme en el tema de Perejil y coadyuvó en mediaciones como con Libia o en Oriente Medio.
Sería sin embargo, en el tema antiterrorista, donde alcanzaría sus mayores éxitos, desde la firmeza política y policial, no desdeñando la posibilidad de alcanzar la paz, pero no dejándose engañar por la tregua trampa, hasta acorralar a los asesinos.
En lo social, sus acuerdos con los sindicatos, permitieron una paz social más que continuada, solo rota por la huelga general más política que laboral.
No todo fueron luces, lógicamente hubo sombras, como llamar a los asesinos “movimiento de liberación vasco”, o la boda, un tanto faraónica, sobre todo para un hombre sobrio como él, de su hija. También el no exigir el cumplimiento de la ley en el contencioso de Polanco respecto a Antena 3 Radio. Posiblemente lo que mas se le critique sea la participación en la, mal llamada, Guerra de Irak. Este es un tema de gran debate, personalmente fui favorable al apoyo a la coalición, ya que había suficientes resoluciones de la ONU al respecto, por mucho que los contrarios a la participación hayan intentado ocultarlo, y porque nunca he creído que las decisiones de la ONU deban ser el eje de actuación de los países, tanto por su inoperancia como por la escasa validez que puedan tener las decisiones de una organización bajo sospecha, desde su Secretario General hasta sus Cascos Azules: corrupción, robos, violaciones, inhibición, recordemos Ruanda, Kosovo o actualmente Darfur. Por tanto esperar que sean correctas las decisiones de una institución que tiene entre sus países a Corea del Norte o Irán, por citar algunos, no es lo más adecuado.
En cualquier caso, el asunto de la intervención seguirá siendo tema de debate, pero nada de lo anteriormente dicho, de esas sombras, podrán negar la acción de gobierno de un señor cuyo desapego al poder quedó demostrado con su decisión de no presentarse a mas de una reelección, ¿quién lo ha hecho en este país?.
Cuando vemos la desastrosa política interior y exterior del gobierno del PSOE, se nos presenta más diáfana la excelente política del Presidente Aznar que cogió un país en crisis y dejó una nación en pleno desarrollo, situación que, en solo dos años, el Sr. Rodríguez ha invertido negativamente. No me cabe duda de que en el futuro, apagadas las falacias y estudiada la época de Aznar con ecuanimidad, se le reconocerá como el mejor Presidente de la democracia hasta este momento

No hay comentarios: