Carta abierta al Sr. Martín Pallín

Estimado Sr. Juez, Ayer tuve ocasión de verle en el debate de TV Intereconomia por la noche, en “el gato al agua”. Su actuación no hizo más que reafirmarme en su soberbia, ínfulas de superioridad y desprecio hacia los demás. Pero lo que me preocupo no fue su displicencia, sino una frase que dijo, en un intento de menospreciar la manifestación del sábado pasado. Vino usted a decir que en democracia solo las elecciones legitiman las actuaciones. Me parece que la filosofía que subyace tras esa aseveración es peligrosa y mas procediendo de un juez, pues, Sr. Martín Tallin, en democracia hay otras muchas actuaciones tan o mas legitimas que unas elecciones y por diversas causas: en primer lugar, porque en este momento las elecciones en España dejan mucho que desear debido a la actual ley electoral que prima excesivamente a las minorías y, sobre todo a las nacionalistas. En segundo lugar, porque al tratarse de listas cerradas, se vota a personas que desconocemos y, además, no son responsables ante los ciudadanos. Por ultimo, porque los programas electorales no son contratos con los ciudadanos y no son de obligado cumplimiento, es mas como dijo un correligionario suyo, Tierno Galván, son para incumplirlos, o para añadir lo que no aparecía, como hace el Presidente con el estatuto catalán o las negociaciones con ETA. Por tanto, Sr. juez, las elecciones en este país no son el culmen de la democracia, son un elemento mas. Sin embargo la libertad de expresión, reunión y manifestación si son elementos de libertad, donde el individuo, solo o en conjunto, puede manifestar sus opiniones sin que para ello necesite filtros de ningún tipo. Y la manifestación de las victimas del pasado sábado fue un claro exponente de la libertad de la sociedad civil, esa libertad que tanto miedo le da a usted y a sus adláteres, pues temen al hombre libre, que piense por si mismo y que no siga las directrices de ciertos personajes cuyos intereses son mas bien espurios. Señor juez, la libertades son mas que elecciones cada cierto tiempo, la libertad es mi derecho a no estar de acuerdo con sus planteamientos y podérselo decir, como estoy haciendo, y, al mismo tiempo, parafraseando a Voltaire, defender su derecho a decir lo que Ud. estime oportuno.