lunes, octubre 02, 2006

La rebelión cívica

Que propugnaba ayer el Presidente de la AVT contra las decisiones del gobierno en relación a ETA es sin ninguna duda la propuesta mas clara y firme que se puede dirigir a una sociedad. Quienes creemos en la democracia, pero también en el derecho de la sociedad a oponerse a un gobierno que ha traicionado los principios fundamentales de esa democracia y la legalidad, que está cambiando ignominiosa y subrepticiamente la Constitución y desmembrando a España, tenemos el derecho de rebelarnos contra ello por medios democráticos y pacíficos.
Todas las manifestaciones de la AVT han demostrado esa firmeza y ese respeto: nunca se queman coches o contenedores, se tiran piedras o se destroza el mobiliario urbano, ni siquiera se pisan los parterres de las avenidas por las que transcurren. Por supuesto nunca se agrede a nadie, pese a ciertos intentos de hacer creer lo contrario, como en el caso Bono, ni siquiera el desahogo verbal suele ser estruendoso ni mucho menos soez. Eso da más fuerza a dichas demostraciones, demuestran que, por lo menos una parte de la sociedad, está madura para ejercer sus derechos y sus responsabilidades, que asume su responsabilidad cívica y democrática frente a un gobierno mentiroso y tramposo.
Por eso, la propuesta del Sr. Alcaraz tiene un calado muy profundo, nos pone ante esa responsabilidad en su grado máximo, ¿estamos dispuestos para asumirla?. Creo que si otras sociedades menos maduras democráticamente lo han hecho, nosotros debemos y podemos hacerlo. Recordemos la actitud de los ucranianos contra unos resultados electorales falseados, aguantando a pie firme, pese a las condiciones atmosféricas, la incomodidad y la presión del poder, hasta que consiguieron elecciones democráticas y libres. Mas recientemente la presión de los húngaros contra un gobierno socialista falaz y mentiroso, ¿nos suena?, al que han presionado en la calle con firmeza y responsabilidad salvo unos cuantos radicales o provocadores. Si esos países todavía democráticamente nuevos han dado ese ejemplo, ¡como no vamos a poder darlo nosotros!, de una vez por todas el gobierno debe entender que no lo puede todo, que la sociedad civil tiene algo que decir y que los intereses partidarios no pueden primar sobre los colectivos, que intentar perpetuarse en el poder no se puede hacer desde la cesión al terrorismo ni a los separatistas, que la sociedad no puede tolerarlo y que actuará en consecuencia a través de todos los cauces que una sociedad libre tiene, tanto judiciales y políticos como a través de las movilizaciones, España no puede estar en almoneda y entregar algún trozo o trozos de la misma a los asesinos y terroristas, eso no es aceptable y no debemos admitirlo. Apoyemos la propuesta de la AVT, rebelión cívica ¡ya!.

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