jueves, marzo 03, 2011

Un abuelo para la democracia tunecina


Cada vez parece mas claro que el Presidente Rodríguez tiene algún tipo de problema mental de tipo obsesivo, pues no parece normal que el famoso abuelo aparezca a todas horas y lo mismo valga para un roto que para un descosido.

Desde el mayor respeto al abuelo, si es que existió, no tengo nada claro que sea un ejemplo a seguir para la democracia tunecina, entre otras cosas porque el régimen todavía vigente, es socialista, recordemos que Burguiba, padre de la independencia de Tunicia era un prócer socialista creado a los pechos de sus conmilitones franceses y que su partido, el Neo Destur, perteneció a la Internacional Socialista, al igual que el de Ben Alí, el RCD, sucesor del anterior. Los Felipe, Rodríguez, Mitterand, etc. se sentaban junto al ahora defenestrado dirigente tunecino en las reuniones de la Internacional del ramo. Por ello no es extraño que cuando el socialista italiano Craxi huyó de la justicia se refugiara en Tunicia.

Por tanto, no creo que el abuelo de nuestro Presidente sea un ejemplo para ellos, pues debemos recordar que fue uno de los oficiales que ayudó a la derrota de la revolución del ´34 en Asturias, donde, por cierto, se usaron soldados musulmanes. Creo que nuestro líder nacional ha desbarrado un tanto al ponerlo como ejemplo de mártir de la democracia, aunque dudo que los tunecinos supiesen nada del dichoso abuelo.

No debemos darle mayor importancia porque las meteduras de pata de nuestro insigne leonés, ¿o vallisoletano?, son cada vez mas y mejores. Por que tiene su aquel que vaya al país norteafricano a brindarles nuestra experiencia de la transición y sacando pecho de nuestra democracia tras haber vendido unos pedazos del país a dos de las satrapías mas señeras del mundo árabe: Emiratos Árabes Unidos y Qatar, dirigidas por emires medievales y donde los derechos humanos no es que brillen por su ausencia, es que están prohibidos por ley y sino que se lo pregunten a los numerosos trabajadores extranjeros, sobre todo blangladeshíes, indios, filipinos y pakistaníes además de gentes de otras naciones árabes.

No le ha importado al “demócrata” Rodríguez mendigar dineros a los señores del dromedario y el halcón y luego vender democracia a los norteafricanos. Lo cual no debe sorprendernos teniendo en cuenta sus amistades con los Castro, Chávez u Ortega, quienes, por cierto, siguen defendiendo a “perro loco” Gadaffi sin ambages ni complejos.

Nuestro obnubilado Presidente debería reflexionar si no va siendo hora de que el abuelo descanse y él, si de verdad es tan “dialogante” y “demócrata”, convoque elecciones generales para que los españoles podamos agradecerle sus años de servicio enviándole al paro, momento en el que, posiblemente, España pueda empezar una recuperación no solo económica, sobre todo moral y que vuelva a ser respetada en el mundo, una vez desvanecido el personaje que nos ha conducido a la debacle y quiere hacer lo mismo con otros, como Tunicia.

1 comentario:

Rancés Alonso dijo...

muy bien!!
http://cantantesdelaweb.blogspot.com/