Los cosacos del PSOE

¡Hurra, cosacos del desierto!¡Hurra!
la Europa os brinda espléndido botín:
sangrienta charca sus campiñas sean,
de los grajos su ejército festín….

Son los primeros versos de la Canción del Cosaco de José de Espronceda y lo traigo a colación porque es la primera imagen que me vino a la memoria cuando vi. la entrevista entre el Gran productor de parados y mamporrero de Rodríguez para asuntos catalanes, Sr. Chaves y el jefe de la fracción catalana de cosacos socialistas, entrevista en la que se entregaba el “espléndido botín” español en vez de europeo, a los nacionalsocialistas catalanes.

La desvergüenza que impera en las relaciones Rodríguez- Montilla ha quedado escenificada en la reunión de ayer: dos atriles, como si los intervinientes fuesen representantes de dos Estados, acuerdos “bilaterales”, una sola bandera, la catalana, etc.. Por supuesto, lo que la “nación“ catalana acuerde con el gobierno del resto de España no es cuestionable por nadie y el resto del país deberá aceptar las migajas, si queda alguna, restantes.

Así que los cosacos socialistas catalanes, dirigidos por Taras Bulba Montilla, pactan con los cosacos zapateriles, dirigidos en esta ocasión por Krasnov Chaves y se reparten la antigua España cantando,

Nuestros sean su oro y sus placeres
gocemos de ese campo y eso sol

Tras expoliar las arcas nacionales ya exhaustas por la crisis.

Y frente a este latrocinio,¿que reacción se produce en la oposición y en el propio PSOE no catalán?, pues la habitual, que también expresaba Espronceda

Vedlos huir para esconder su oro,
vedlos, cobardes, lágrimas verter…..

Tan claro y diáfano como el verso es la actuación de nuestros políticos: cobardes, cuando no colaboracionistas de esta situación y, eso si, tratando de mantener su posición para continuar chupando del presupuesto y, por tanto, del trabajo de los ciudadanos españoles.

Ante esta situación, solo queda que se produzca una reacción ciudadana, que la sociedad civil obligue a la clase dirigente a terminar de una vez por todas con este expolio, con este entreguismo al nacionalsocialismo catalán, con las desigualdades económicas, lingüísticas, sociales, etc. que está generando este despropósito en que se ha convertido el estado autonómico y con los costes exorbitantes de tanto “aparatchik” partidista y burocracia regional.

De no actuar rápida y contundentemente, la crisis socio-política va a ser cada vez más amplia y la solución más difícil, con unas consecuencias impensables actualmente. Por ello, se impone esa resistencia cívica y esa presión para que se produzca el cambio radical que la política española necesita.