sábado, agosto 20, 2011

Contra la JMJ: la excrescencia moral

No pensaba escribir al respecto, pues considero que los multitudinarios actos y, sobre todo, las palabras del Santo Padre eran más que suficientes, en su calor, valentía y verdad y que lo que yo escribiese no aportaría nada especial.

Sin embargo, las actitudes del gobierno y de los “antipapa” me han, literalmente, obligado, a tirar de ordenador, pues sobre esos temas si quisiera aportar alguna reflexión, pues creo que los hechos tienen su relevancia, no en deslucir la brillantez de los actos, ni la alegría de los peregrinos o las palabras del Papa pero si sobre el pensamiento y comportamiento de una parte de la sociedad española.

En primer lugar, nunca he comprendido que quienes no creen en Dios se manifiesten contra El y le insulten o lo hagan con los creyentes. Si yo no creo que exista una cosa o un ser, no pierdo el tiempo en manifestarme en su contra. Si, por ejemplo, no creo en, digamos, el capitán Garfio no salgo con una pancarta en su contra, ya que sería ridículo, pues lo mismo deberían estos ateos hacer con Dios pero, en fin...

En segundo lugar, tampoco entiendo porque la izquierda vociferante es tan guarra. Ves a los chavales católicos de todo el mundo, vestidos como jóvenes que son, informalmente, pero correctos, limpios, educados y, ¡caramba!, ¡ cuanta católica guapa hay!, supongo que guapos también, pero en esos no me fijo tanto, bueno volviendo a lo serio, no me parece lógico que los izquierdistas sean tan sucios tanto de vestimenta, como de boca o actitud. Lanzar condones, levantarse las faldas para enseñar sus partes y demostrar, supongo, que no tienen para bragas las pobres proletarias, no afeitarse el sobaco, ¡que manía con eso!, no usar desodorantes, escupir a los peregrinos, también supongo que porque el alcohol y las drogas les salen por las cejas y tienen que expulsarlos, agredirlos porque rezan o decir que “ vamos a quemaros como en el ´36” además de inquietante resulta grosero y soez, demostración de una “juventud” moralmente acabada.

Ciertamente, esto no es nuevo, basta obervar cualquier manifestación de la izquierda y la escenografía y el vocabulario es el mismo, confunden el ser “proletarios” con guarros y soeces, claro que ellos de proletarios tienen poco, si alguno ha currado en su vida será un milagro.

Pero si bochornoso es el comportamiento de la horda, mas lamentables es el apoyo, directo o velado, de los dirigentes de la izquierda y de sus medios de comunicación, hechos que nos retrotraen a los mas rancio y cutre de los años ´30, demostración de una ideología liquidada a la que se lo le queda el insulto y la agresión. Esta actitud liberticida es histórica en comunistas, socialistas y anarquistas como la historia y sus crónicas recogen.

Por último quería referirme a la hipocresía de los convocantes que, no atreviéndose, oficialmente, a pedir autorización contra la visita del Sumo Pontífice, lo hacen contra el coste del viaje. Es de verdadera carcajada, porque no solo es que sepamos que a los españoles no nos va a costar un duro, sino que los beneficios instantáneos de un millón de personas no hay ni que demostrarlo, sin olvidar la imagen de Madrid como ciudad acogedora, que no pueden empañar esos cafres y que volverá en forma de visitantes. No olvidemos que ciudades como Sydney o Toronto, nada católicas, fueron sedes y estuvieron encantadas, algún beneficio material, aparte del inconmensurable espiritual, habría.

Pero lo más curioso es que a quienes tanto preocupan esos costes no han dudado en arruinar a los comerciantes del Sol con su acampada, costar al erario público en seguridad, por no hablar de limpieza. Que tampoco parece preocuparles los gastos del llamado día del orgullo gay, por cierto subvencionado o de otros eventos como los 1 de mayo, etc.. Curiosamente, solo les preocupa el gran evento de la alegría sin crispación ni insultos, lo que no se puede decir del mencionado día o la celebración de los sindicalistas más que de los trabajadores y otras. Curiosa amnesia que deben cuidarse rápidamente.

En cualquier caso, estas actitudes vomitivas e incidentes bochornosos vienen a ratificar, una vez más, que la izquierda es antidemocrática y liberticida y que debemos enfrentarnos con firmeza a ella desde nuestros valores cristianos y democráticos y decir a estos “logseros” que los principios democráticos y de los derechos humanos están en la Iglesia y para conocerlo solo hay que leer un poco mas y manifestarse un poco menos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Completamente de acuerdo , no saben comportarse:
http://www.youtube.com/watch?v=bXVjPHt-vHU